La mañana de este domingo (30) fue inolvidable para los niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) atendidos por el Instituto Santos Dumont (ISD). Participaron de un espectáculo adaptado promovido por el Circo Americano, que se exhibe en Natal. Para brindar una experiencia inclusiva, el circo ajustó su presentación y redujo el ruido sonoro y la intensidad de la iluminación dentro de la carpa, lo que aseguró un mayor apoyo sensorial a los espectadores.
El espectáculo contó con actuaciones de payasos, contorsionistas, trapecistas y el hombre bala, que fue lanzado desde un cañón a la arena, provocando gritos y jadeos del público. En total, 15 niños usuarios del ISD, acompañados de sus tutores, tuvieron la oportunidad de disfrutar de las maravillas del arte circense.
Uno de ellos era el pequeño Nicolás, de apenas 4 años. Fue al circo acompañado de su madre, la técnica de enfermería Rosângela Martins. “A lo largo de la semana hablé con Nicollas sobre el circo, le expliqué que sería un lugar con más gente y mucha información, lo preparé para este momento. Al principio tuvo un poco de miedo, pero luego logró disfrutar del espectáculo”, dice Rosângela.
Esta conversación previa es importante para preparar a los niños autistas para un entorno inusual. Como explica la preceptora logopeda del ISD, Luana Aprígio, las personas con TEA presentan un patrón de rigidez conductual, lo que convierte los eventos fuera de rutina en un desafío. “La previsibilidad que aportan los padres o tutores ayuda a que los niños estén más tranquilos y se adapten mejor al momento, que en este caso fue el espectáculo del circo”.
El profesional destaca también la importancia de iniciativas como la que lleva a cabo el circo para asegurar la socialización de este público. “Estos momentos reservados, realizados con algunos ajustes, ayudan a las personas con discapacidad a sentirse más cómodas y tener una mejor experiencia. Sin embargo, es importante que esta audiencia participe en cualquier sesión si se siente cómoda y quiere participar”.
Los niños y acompañantes que fueron al circo son residentes de Macaíba. Viajaron en transporte proporcionado por el Instituto Santos Dumont. Los boletos fueron donados por Circo Americano, sin costo alguno para los presentes.
El evento no sólo celebró la diversidad, sino que también destacó la importancia de crear espacios donde todos los niños puedan sentirse bienvenidos y plenamente integrados. “El espectáculo fue muy importante para mi hijo. Espero que haya otras iniciativas como ésta, para que pueda disfrutarlo como cualquier otro niño”, afirmó Tânia Dias, madre del pequeño Ryan, también atendido por el ISD.
Al finalizar el espectáculo, los niños se marcharon con sonrisas radiantes, demostrando no sólo la alegría del momento, sino también el logro de un paso más hacia la plena inclusión en las actividades culturales y sociales.
Acerca del distrito escolar independiente
El Instituto Santos Dumont (ISD) es una Organización Social vinculada al Ministerio de Educación (MEC) y engloba al Instituto Internacional de Neurociencia Edmond y Lily Safra y al Centro de Educación e Investigación en Salud Anita Garibaldi, ambos en Macaíba. La misión del ISD es promover la educación para la vida, formando ciudadanos a través de acciones integradas de enseñanza, investigación y extensión, además de contribuir para una transformación más justa y humana de la realidad social brasileña.